¡Nunca se había pagado por algo que saliera tan mal!
La comedia es uno de los géneros consentidos por los espectadores de teatro en México, y con mucha razón, pues todos amamos la sensación que nos queda después de haber reído a carcajadas al ver una puesta en escena, y aunque actualmente hacer reír no es cosa fácil, la buena noticia es que “La obra que sale mal” lo logra a cada minuto hasta con el espectador más exigente.
Ganadora del Premio Olivier a mejor comedia en 2015, un Tony Awards por mejor escenografía y un Broadway Audience Choice Award por mejor puesta en escena en 2017. ‘La obra que sale mal’ lleva dos temporadas brillantes en la Ciudad de México, convirtiéndose en una de las opciones favoritas de entretenimiento familiar.
Todo comienza cuando el grupo teatral amateur de la Universidad de Tlalpan está a punto de presentar “El asesinato en la mansión Haversham”, en el escenario hay dos asistentes de producción tratando de hacer los últimos arreglos, sin embargo, por la premura del estreno no lo logran del todo. A partir de esto y otras fallas que se van desencadenando desde el primer minuto, veremos cómo los actores intentan rescatar la obra por la que han trabajado tanto.
La trama, que debería ser sobre misterio e intriga termina provocando incontenibles risas en los espectadores, esto, reforzado por la seriedad con que los actores se toman su papel y el propósito de llevar a cabo la obra hasta el final, pase lo que pase (literalmente).
“La obra que sale mal” es una comedia alucinante, sorprendente y caótica, pues cuando crees que ya no puede ponerse “peor”, las circunstancias por las que atraviesan los pobres actores llegan a un nuevo nivel y ellos deben seguir “como si nada”.
Sin duda este trabajo demuestra que para representar a un mal actor se debe ser un excelente actor, y de eso dan cátedra los integrantes del elenco; Claudia Álvarez, Daniel Haddad, Artús Chávez, Juan Carlos Medellín, Ari Albarrán, Iván Carbajal, Adrian Vázquez, Daniel Bretón, entre otros, quienes también muestran un gran control físico, dominio del clown y una entrega total a este gran proyecto traído desde Londres.
Cabe mencionar que un plus del que hicieron uso fue un entrenamiento intenso por Mark Bell, maestro de London Academy of Music and Dramatic Art, experto en comedia y director de la obra original. Además cuenta con un director residente también magnífico: Jerónimo Best.
Así que, respondiendo a la pregunta de si vale la pena ver “La obra que sale mal”, la respuesta es ¡nunca algo que sale mal había sido tan divertido! Si lo que buscas es ver una puesta en escena excelente, hilarante y hasta un tanto interactiva, debes correr a ver “La obra que sale mal” para su tercera temporada en el Centro Cultural Teatro 2, este febrero de 2019.